Sobre la vergüenza

Sobre el sentimiento de vergüenza,
se ha escrito mucho.

Es una emoción desoladora
que obliga a esquinarse
a inclinar el rostro y silenciarla.

No es el “pedir perdón” por quienes somos
lo que alivia la vergüenza,
sino el reconocimiento ante los demás
de que somos como somos:
en definitiva,
tenemos derecho a ser,
a estar aquí y a manifestarnos tal cual.

En esto, no hay error, ni concesión posible.

Los primeros pasos,
siempre son atrevimientos…

Pero crecemos a través de sucesivos atrevimientos.