Escucharse

Escucharse hablar a uno mismo
es, probablemente,
la definición más elemental de conciencia. 

No obstante,
cuando uno se habla a sí mismo,
nunca está solo.

En la conversación
siempre intervienen
muchos de los que nos rodean:
padres, hijos, amigos,
y varios NO invitados más.

Es muy difícil estar solo
incluso cuando uno lo esté físicamente.

Las cadenas y los muros de los que nos rodean
no se ven con claridad,
son casi siempre invisibles,
aunque no menos reales o insuperables.