Dudar y confiar
La duda,
nace de la suspicacia y la sospecha, de la conjetura
y es un suceso que acontece a todos,
y en mucho de lo que hace. 

Dudamos, porque en este mismo dudar
se encuentra su contrario inevitable: confiar. 

Todo se inicia y se termina.
Pero terminar, no es necesariamente rescindir.
También es ultimar, sellar y completar. 

El amor, la amistad, los sentimientos
son buenas muestras de lo anterior
y en ellos se manifiesta más fácilmente al desnudo
la duda y la confianza
que todo ser humano experimenta. 

Y es que la vida, es un continuo de principios y finales.