Hablando

Creo que el hombre, se refiere a sí mismo
más de lo que sería conveniente.
Hablamos de nosotros, 
convencidos del interés
que podemos despertar en el otro.
 
Eso sí, algunos lo practican más que otros,
y necesitan hacerlo porque
dejar de ser lo que se ha sido,
o no ser lo que se quiere ser,
constituye un camino intransitable e incómodo:
de ahí que… «uno mismo», 
se proponga como tema de conversación.
 
Dejar de mirarse,
para mirar al otro
requiere recursos mentales
que no siempre, 
ni todas las veces se encuentran disponibles,

y que por otro lado, cuesta poner en práctica.

 

Dice Fernando Colina -psiquiatra y escritor,  al que considero, que:

«Hay hombres que solo hablan de sí mismos,
y ni siquiera su silencio, alcanza a impedirlo».